miércoles, 2 de octubre de 2013
Hotel Bilila Lodge
Simple, elegante y exótico… así es el estilo de este recinto vacacional, sinónimo de convivencia y encuentro con la naturaleza: Hotel Bilila Lodge.
Edificado en el corazón de Tanzania, en el parque nacional del Serengueti, lugar reconocido como santuario de la vida silvestre por la Unesco, el hotel goza de una localización excepcionalmente privilegiada. El objetivo del hotel es mantener la tradición de la idea característica de un safari africano, donde lo primordial es estar en contacto con la flora y fauna de la sabana, pero eliminando ese entorno austero y crudo por un ambiente elegante y simple.
Así, el sentimiento que provoca es el de intimidad de una aventura silvestre combinado con la estancia en un hotel lujoso. El hotel está construido sobre un terreno elevado, por lo tanto una vista panorámica del Serengueti se asoma en el horizonte. Se encuentra rodeado por una laguna natural, la cual es visitada por manadas de elefantes a diario, un espectáculo único para los usuarios ansiosos por el contacto con los animales. El albergue es una de las mejores y más lujosas acomodaciones de toda África, la experiencia que se vive en éste es inigualable. Bilila Lodge cuenta con setenta y siete habitaciones de lujo, cada una con terraza y vista a los alrededores, amueblado exterior contemporáneo y jacuzzi, ideales para recargar energías y observar el hábitat natural.
Además ofrece cinco villas privadas, cada una con servicio de mayordomo y decoradas con artesanías y obras escogidas por expertos en arte africano, que lucen perfectas en las instalaciones para una experiencia aún más íntima. También hay un spa denominado “Anantara”, para que los huéspedes disfruten de masajes y métodos de relajación característicos de las tribus nativas.
La alberca denominada “Infinity Pool” está hecha para generar el efecto óptico de no tener fin, y así unirse con la línea del horizonte. Los dos restaurantes bar ofrecen opción de seis diferentes tipos de cocina al día, es exquisita por su variedad para los visitantes de las diversas partes del mundo.
Estudio 3.14 - CHIC HAUS agosto 2013
Desde el momento en que se entra al taller de Estudio 3.14 se puede percibir que se trata de un espacio de relación, en donde las experiencias y conocimientos de diferentes personas convergen para generar ideas únicas. “La firma nació de una convicción absoluta en el poder del diseño”, comenta Leonardo Díaz, quien junto con el arquitecto Gerardo Sánchez, iniciaron la peculiar e innovadora propuesta que representa al estudio: ser un despacho multidisciplinario dedicado exclusivamente al diseño arquitectónico y urbano.
La trayectoria de la firma comenzó hace trece años en Puerto Vallarta, cuando fueron contratados para desarrollar el proyecto de una residencia en la sierra. A raíz de que se trataba de un terreno con mucha pendiente, escurrimientos de agua y arbolado protegido, Díaz y Sánchez consideran que fue una experiencia que los marcó en el tema de la naturaleza, puesto que para lograr que la arquitectura se integrara al contexto, tuvieron que acomodar los elementos de manera minuciosa, de forma que se generara una imagen bella respetando la vegetación y los ríos del terreno.
Posteriormente, la joven firma comenzó a desempeñarse en la industria turística en Bahía de Banderas, coyuntura de la que empezaron a surgir sus clientes internacionales, puesto que, gracias al gran turismo con el que cuenta Puerto Vallarta, su trabajo fue conocido por gente de todo el mundo, que al ver la originalidad y calidad en sus diseños, contrataba al despacho para realizar proyectos en diferentes países. Fue así que Estudio 3.14 comenzó a diseñar proyectos en ciudades como Barcelona, París, Malibú, California y Nueva York, entre otras.
Díaz y Sánchez destacan que la experiencia de realizar proyectos internacionales les ha resultado muy provechosa, ya que, aparte de aprender cómo funcionan las cosas en otros países, pudieron conocer y trabajar con diferentes personas, en lugares distintos. “La generación del conocimiento se da cuando las ideas viajan por todo el mundo, porque vivimos en una cultura y en una realidad global. Los arquitectos tenemos que ser globales porque estamos sirviendo a un mercado global”, comenta Díaz.
Además, en México también han desarrollado importantes proyectos de diseño, por ejemplo, el malecón de Puerto Vallarta, por el que fueron reconocidos por la Revista Obras como la obra del año 2012 y ganaron el XV
Premio de Arquitectura 2013, por el Colegio de Arquitectos del Estado de Jalisco. De igual manera, diseñaron el Melange World Spa en Nuevo Vallarta, por el que ganaron la V Bienal Internacional 2011 del Consejo Iberoamericano de Diseñadores de Interiorismo, así como una mención honorífica en IIDA Best Interiors of Latin America 2012.
Residencia Nettleton 198- Chic Haus Junio 2013
Localizada en la exclusiva zona de Clifton, en Ciudad del Cabo, Sudáfrica, la residencia Nettleton 198 se distingue por su entorno que la rodea y el lujo con que fue diseñada por la firma Stefan Antoni Olmesdahl Truen Architects (SAOTA), con base en Ciudad del Cabo.
Realizada para una pareja británica que decidió instalarse permanentemente en dicha ciudad, la residencia es uno de los proyectos más impactantes que ha llevado a cabo la oficina SAOTA. Los clientes tenían requerimientos muy claros en cuanto al programa arquitectónico. Ellos necesitaban seis habitaciones y una casa de siete niveles, para aprovechar el terreno montañoso, así como las vistas y la parte posterior del predio.
La residencia se adapta notoriamente a su entorno, manteniendo una conexión física y visual con él. Es importante considerar que ya existía una estructura en el sitio. Para adaptarse al desnivel, se tuvieron que modificar los pisos inferiores, mientras que los superiores se demolieron para construir dos niveles adicionales.
Una de las principales intenciones de diseño fue potenciar las espectaculares vistas, tanto
del mar, como del pico y la cabeza de león. El área social puede abrirse por completo
hacia el este y el oeste, convirtiéndose en un espacio continuo. El impacto del sol fue una de las variables que definió la apertura del volumen al exterior. Particularmente, la fachada oeste se ve afectada por la incidencia solar, por lo que se utilizaron cortinas, parasoles y louvers como medios de protección térmica.
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